Pueden escuchar el álbum aquí. Ojalá antes de leer este blog :p
Desde que suenan los cantos melodiosos y al tiempo desgarradores de «Welcome To My Island», este álbum ya empieza a cumplir lo que promete.
Desire, I Want To Turn Into You, el segundo álbum de estudio de la muy infravalorada Caroline Polachek es el sonido de las almas libres que buscan la libertad en escondrijos imaginarios y lejos de todo y de todos.
Y quisiera hablar mucho de cómo en una sociedad que desecha las artistas femeninas a los 30, ver surgir una estrella con un talento único y una propuesta más que interesante a sus 38 años es una delicia, pero hoy quiero hablar de las canciones del álbum y de cómo Caroline nos pinta abstracciones que tienen todo el sentido del mundo porque dicen más que cualquier disertación sobre el deseo que alguna vez se haya escrito.
Welcome To My Island
Pero la libertad que menciono no es una libertad cínica, ni más faltaba; con la primera canción ya mencionada, Caroline nos da la bienvenida y nos dice que si vimos las palmas que se mueven al son del viento y que adornan su isla.
Ella nos cuenta su pretensión: quiere convertirse en el deseo mismo, ser quien persigue el deseo y quien lo cuida -todo a la vez- según mencionó en una entrevista sobre el juego de palabras que es el título en inglés. «Deseo, me quiero convertir/apoyar/dirigir hacia ti» es la promesa cumplida del álbum desde el segundo uno.
Welcome To My Island suena a muchas cosas que ya muchos otros han mencionado, pero para mí desde este primer tema se muestra como una declaración de amor por la libertad, el escapismo y el deseo (duh). Desde cuestionar a su padre por decirle que no desperdicie su potencial en la música más pop hasta hacer un puente improvisado de guitarra sin saber tocar la guitarra (sale bien).
La perfecta antesala para lo que se viene.
Pretty In Possible
Pasamos a Pretty In Possible, otro juego de palabras que legitima los escenarios falsos que nos hacemos en la cabeza, porque al fin y al cabo ¿qué más da? Hay belleza en admitir que somos los soñadores sin remedio que nunca le contamos a nadie que en realidad somos.
Lo bonito es que Caroline reconoce el mal que hay en volverse un soñador sin remedio: las cosas no se hacen realidad solo imaginando y planeando, pero siempre podemos hallar las herramientas para convertir ese deseo en algo tangible.
«El potencial es la droga que nunca supieron que nunca probaste» es mi nueva frase favorita.
Mientras tanto, 3 minutos más de imaginación y seguimos.
Bunny Is A Rider
El single principal del proyecto, con un bajo que resuena brutalmente, es la primera canción que habla sobre escapismo en el álbum. Nos lleva directamente al escenario donde no queremos que nos toquen ni que nos miren y no queremos otra compañía que no sea la nuestra.
En el video musical se pinta una figura diabólica que nos persigue en un laberinto de cajas etiquetadas con objetos tangibles e intangibles, pero Caroline tiene un botón en su brazo que le ayuda a escapar siempre que le encuentra.
Ni los satélites pueden localizar a Bunny, el concepto que se inventa Caroline -basado en el mil veces referenciado conejo de ya saben qué historia sobre un sombrerero, un gato que sonríe y una reina psicópata- y que bien podrías ser tú apagando el teléfono un fin de semana para irte de paseo a un lugar nuevo, donde nadie te va a molestar.
Sunset
De las mejores canciones que existen, y es una canción pop más melosa que cualquier otra.
Imposible no contagiarse de la energía de una canción que compara al ser amado con la belleza de una atardecer. Y quien diga lo contrario, que se tome el pulso a ver si aún tiene corazón.
Prueba de que se puede tomar una estructura ya conocida y que con un poco de creatividad y percusión flamenca se hace espacio sin problemas en el álbum al plantear lo liberador que es estar con alguien que realmente amas.
Existir en la misma realidad de alguien que te entiende como nadie más en el mundo es también una forma de escapar de todo cuando «habitas tu cuerpo como si no estuvieras invitado dentro» y esta persona es la cura.
Crude Drawing Of An Angel
Este tema puede tener muchas interpretaciones, pero la que más he visto -y con la que concuerdo- cuenta cómo se siente alguien que está tratando de salvaguardar la presencia de una persona dibujándole o pintándole por el amor intenso que le tiene.
A su vez, la canción refleja las ansias de que, una vez esta persona se vaya, dicho dibujo será lo único que quede de recuerdo. Por eso Caroline se expresa dibujando lo bueno y lo malo de este ser e insiste en el detalle con el que se dibuja, casi que queriendo capturar su esencia sin que se escape nada.
Un contraste entre el deseo profundo y la melancolía de la partida, y en melodía y producción se expande aún más lo que no se alcanza a detallar en palabras. Posiblemente la más sofisticada del álbum.
I Believe
Podría ser perfectamente la mejor canción pop de la década.
Un himno dedicado a Sophie, quien falleció prematuramente pero dejó huella en la industria por su talento e influencia, Caroline decide que este homenaje no será una balada (aunque saldría después versión acústica) sino que será toda una celebración de la idea de que un legado así no muere nunca.
Al mismo tiempo, el goce de la imaginación, que supera la muerte misma: a ritmo de falsetes perfectos, Caroline sabe que tendrán un momento de rencuentro, como dice el coro, como sea que la vida o la muerte lo quieran, pero ocurrirá.
Por el momento, ¡sólo queda bailar!
Fly To You (con Grimes y Dido)
La única canción del álbum con colaboraciones (y qué colaboraciones, maigad).
Es un tema sobre el choque emocional de encontrarse con alguien con quien tienes cuentas pendientes sentimentalmente hablando.
Toda la producción apoya el propósito de la efervescencia emocional de un momento así. No recuerdo quien decía que el sentimiento más explosivo del ser humano es el que se da en el reencuentro.
Y es que este álbum al ser profundamente no narrativo, busca en su lugar traducir esta y muchas más emociones y sensaciones, con todos sus matices, y lo hace excelentemente con su percusión hiper inflada y ansiosa y el aporte de ambos features que le da a quien escucha tres versiones del mismo escenario.
Blood And Butter
Inspirado por Ray Of Light de Madonna (dicho por la misma Caroline) esta canción busca recrear dicho feeling, pero totalmente a su manera: con gaitas y un producción que se balancea aún más agresivamente entre lo analógico y lo digital que el clásico de la reina del pop.
Trata un poco sobre lo adictivo de conocer a alguien nuevo que, al mismo tiempo, genera tensiones en todas nuestras sensaciones; pero más aún sobre cómo cedemos ante dicha persona sin importar lo que pueda salir mal.
Siempre nos queremos hacer los duros en estas situaciones, pero aquí se narra la vulnerabilidad que escondemos ante la persona que nos mueve el suelo.
Una de cal y una de arena, pero versión mejorada.
Hopedrunk Everasking
Volvemos nuevamente al álbum que le da pie a la imaginación y en esta ocasión nos imaginamos en un espacio aislado, etéreo, sin tiempo, donde solo existimos -así sea por un momento- con la persona a la que deseamos. La voz de Caroline, que simula un autotune que no es real sino pura técnica vocal, complementa el espejismo.
Ella entrenó su voz para que fuera un sintetizador humano, haciendo un balance entre cantos de yodeling (los de los irlandeses) y técnica vocal de ópera y de rock. Este álbum no funcionaría igual si no hubiese sido así.
Esta canción es la versión a dos personas de Bunny Is A Rider, que apoya la narrativa del escapismo con la imagen de la ilusión. Es todo un viaje astral y la canción que hay que escuchar sí o sí con audífonos para sentir lo que nos quiere hacer sentir de principio a fin.
Butterfly Net
¿Se acuerdan del mito de la caverna? Pues está ya viejo y desfasado.
Lo nuevo es este temón donde Caroline se imagina persiguiendo recuerdos con una red de mariposas y reflexiona sobre un pasado que hace daño, sobre no querer dejar ir y sobre caer en la ilusión equivocada creada por la persona equivocada.
Aunque no es buen símil, porque la verdad que busca Caroline persiguiendo fantasmas ya ella la sabe muy bien y -consciente o inconscientemente- busca ignorarla, no quiere salir de la cueva ni desechar su red.
Que igual, no me retracto de lo que dije, ya dejen de citar ese mito para todo 😡
Smoke
Haciendo referencia melódica y literalmente a Pretty In Possible (segunda canción del álbum), esta vez no tratamos de crear escenarios felices para escapar de la responsabilidad de hacerlos realidad.
Ahora estamos haciendo escenarios falsos pero para ignorar la posibilidad de que todo nos salga al revés.
Hacerse autoengaño así mismo y admitirlo es un momento cómico de este álbum. No es solo «humo saliendo de un volcán», como Caroline dice, es el meme de «las probabilidades de que una jirafa te ataque son pocas, pero no cero» pero en la vida diaria.
Ah, y sin jirafas, pero igual con sentido del humor.
Billions
La versión extendida tiene más temones igual de buenos, pero quiero acabar el texto como acababa Caroline su álbum en la versión original.
Billions no es una canción para manifestar ser billonario, lamento decepcionar, pero sí usa símiles del dinero, el exceso y la locura para hablar de la abundancia y la plenitud.
El plot-twist es que esa abundancia es sentimental, profundamente humana, y que al final sí pudo convertirse/apoyarse/dirigirse hacia el deseo como tanto así lo quiso, lo gritó y lo detalló durante todo el álbum.
Fuera quien fuera, o lo que fuera, Caroline pudo conseguir su objetivo de ser uno con el deseo mismo, pues ya lo interpretó durante todo el álbum y caímos redondos en la trampa para darnos cuenta cuando canta «never felt so close to you» / «nunca estuve tan cerca de ti» en los últimos coros de Billions.
No había mejor forma de cerrar esta obra maestra.
CARDOFONÍA 
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